viernes, 31 de enero de 2020

¿MINI?CRÍTICA A GOLDEN BOY. ÉRAMOS POCOS Y PARIÓ LA ABUELA.

Bueno, pues ya estamos aquí otra vez. No pensaba hacer una entrada tan reciente a la anterior, pero ya veis, así son las cosas. Resulta que me vi este anime cortito (6 capítulos) con una amiga en una página muy graciosa para ver vídeos a la vez que tus amigos mientras los comentas con ellos y hoy tenemos entrada. Como bien digo en el título, la crítica será de Golden Boy, un anime ecchi muy cortito de los años 90 que vimos por las risas, porque tenía toda la pinta de estar cursed (y no nos equivocamos). Además estaba doblado, como nos gusta.
¿Listos para aprender una nueva lección hoy?

No sé por dónde empezar a hablar, la verdad. Diré que, en general, me ha parecido bastante malo, pero lo malo que es se compensa con lo cursed que está. Es el típico ecchi baboso curseadísimo del año de la polca y creo que no hacen falta más palabras para expresarlo después de haber dicho todo esto. Lo bueno de todo esto es que es corto y te echas unas risas. La clave cuando ves un anime de este tipo es saber a lo que vas y llevar una mentalidad clara, la mentalidad de echarte unas risas.

Los capítulos cuentan historias independientes a cada cual más cursed. Las situaciones no es que sean para mearse, lo que es para mearse es lo cursed que está todo, el cringe que da. No sé si me explico. No te ríes porque OMG EL HUMOR. Te ríes porque WTF ESTÁ USANDO UNA MOTO COMO SATISFYER VÁLGAME LA VIRGEN PURA OMGGGGGG. Creo que ahí queda dicho todo, con un ilustrativo ejemplo que no spoilea mucho porque es una parte muy pequeña de la trama, y ni siquiera es una cosa de la trama, la verdad, porque la trama es como un ente abstracto que está en un plano superior a lo que vienen siendo los capítulos y tus ganas de seguir consumiendo semejante "cosa" (por decir algo).

La trama. Vamos con la trama. Ese ente superior que es como una especie de nebulosa extradimensional en la que nos encontramos inmersos pero de la cual no somos conscientes hasta que empezamos a pensar en el misterio de la vida. La trama es una sorpresa hasta que acaba el primer capítulo, así que no sé si es ético destriparla, pero bueno, la verdad es que en las sinopsis de todos los sitios la destripan, así que allá vamos. Durante todo el primer episodio no sabes muy bien de lo que va la cosa ni qué narices estás viendo, pero al final te lo explican todo y te quedas como "ahhhh filho da puta agora sim entendo": Kintaro Oe, el protagonista, es un chaval de 25 años que ha dejado la universidad de Tokyo porque ya le ha dado todo lo que tenía que dar. Ahora viaja por todo el país para aprender en la Universidad de la Vida. Y ya está. Esta es la trama. Y si te olvidas de cuál es no pasa nada, porque te la recuerdan al final de cada capítulo con unas palabras muy parecidas a estas.

"Kintaro Oe, 25 años. Ha dejado la Universidad de Tokyo porque ya aprendió todo lo que tenía que aprender. Ahora viaja por el país con su bicicleta de trabajo en trabajo aprendiendo en la Universidad de la Vida. No se olviden de su nombre, porque algún día salvará Japón. Algún día salvará al mundo".

Y ahí que va, con su bicicleta mientras la voz en off te narra esto. Vamos, que cada capítulo son historietas paralelas que vive Kintaro al viajar por Japón. En cada una de ellas "aprende" una lección de la vida. Aunque no sé si es él quien aprende o si somos nosotros o quién es el que aprende aquí. Sólo sé que al principio de cada capítulo pone LECCIÓN 1, 2, 3, 4, 5 o 6 (porque no hay más) y ya está. Pero la verdad es que lo que parece en cada capítulo es que el tal Kintaro le da una lección a alguien, no que se la den a él (aunque la verdad, sería de agradecer que le dieran una buena lección). El caso es que cada capítulo va en su bicicleta recitando "aprendo aprendo aprendo" innumerables ocasiones y ya no sabes si el que aprende es él. Las típicas dudas que te surgen.

En cada uno de los episodios, como ya he dicho, va viviendo una aventura. Y en cada una de estas aventuras hay una chica, porque, claro, estamos en un ecchi de los 90, y ya sabemos cuál es la trama de los ecchis de los 90. Evidentemente, cada una de ellas tiene que ser una fuente de ecchi y tienen que ser tratadas por el protagonista como trozos de carne, o al menos, de esta manera las ve. Lo que más impacta en un anime de este tipo es que todas las mujeres estén en puestos de poder, fíjate, si va a ser un anime feminista y todo, hasta nos recuerda al mítico I My Me (eso comentábamos).
El vestido para ir a comprar el pan.

Porque sí, el protagonista, por mucho que aprenda aprenda aprenda es un cerdo pervertido como cualquier protagonista de anime de este tipo de aquella época. No vamos a dejar de caer en los clichés así como así. No hay quien lo aguante, pero no lo voy a decir muy alto, porque resulta que tiene muchos fans y a ver si vamos a tener problemillas como en los buenos tiempos (con Attack on Gemeliers). Lo mejor es su fetiche cursed con los retretes de los baños, no tengo palabras para explicarlo, así que será mejor que lo veáis por vuestra cuenta.

Brrum brrrum
No tengo mucho más que decir. Simplemente que el encanto de Golden Boy es las risas que te puedes echar con lo surrealista que es todo, especialmente el quinto capítulo, que es ya cuando te replanteas qué estás haciendo con tu vida (tarde ya). No sé si lo mejor es la premisa de lo que es el episodio o cierto momento con la bicicleta que traspasa todas las leyes de la gravedad, de la física y del buen gusto. Sin palabras.

En general, no sabría si recomendarlo o no recomendarlo, así que diré lo típico. Cada cual que haga lo que quiera con su vida. Sois mayorcitos y libres de tomar vuestras decisiones, así que si veis esto y no os gusta luego no podréis decir que os he dicho que lo vea. Ni digo ni desdigo. Que cada cuál haga lo que le de la gana bajo su propia responsabilidad.

Aunque, como reflexión final, voy a decir que la experiencia viendo Golden Boy fue positiva. ¿Por qué? Pues no lo sé. Supongo que por las risas que me eché en el quinto episodio y porque me lo paso bien comentando animes con mi amiga (y también me ha gustado escribir esta entrada, cosa rara, porque últimamente me parecen más sosas que una sopa de babas). Y bueno, pues nada, aquí me despido porque se supone que iba a ser una entrada corta y no lo ha sido.

2 comentarios:

  1. Lo único que he aprendido aprendido aprendido es que odio a Kintaro Oe *pota*

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