El anime que toca analizar hoy para el año 2015 es uno de esos animes a los que tenía ganas desde hace tiempo. No me equivocaba, me ha gustado bastante y está por encima de la media en lo que es todo este reto de animes buenos y no tan buenos. Hablo de Kangoku Gakuen, más conocido como Prison School. Al principio no me llamaba mucho la atención, allá por el año en el que lo sacaron, porque pensaba que iba a ser un ecchi básico algo baboso, pero más tarde me dijeron que es un anime de esos que me gustan a mí, de humor algo bestia y absurdo, así que llevo un tiempo con ganas de verlo y aproveché esta oportunidad.
Se trata de un anime cortito, de 12 capítulos, aunque yo en un principio pensaba que tenía 13, pero resulta que el episodio 13 es una OVA. La OVA no la he visto aún, pero la veré en breve, así que aquí me centraré en lo que es el anime: una fantasía surrealista que ni te puedes tomar en serio ni está hecha para tomarse en serio. La verdad es que me ha gustado, como ya he dicho, es todo como una chorrada sin sentido de principio a fin, pero precisamente por eso tiene su encanto. Es como que no sabes lo que estás viendo, hay momentos que son tremendos.
¿La trama? No tiene ni pies ni cabeza. Un grupo de cinco chavales acaban de ser aceptados en un instituto que anteriormente era femenino pero lo han hecho mixto y ahora son los primeros chicos en estudiar allí. El caso es que un día intentan espiar a las chicas en las duchas y les pillan. Y el castigo es duro: tienen que pasar un tiempo encerrados en la prisión que tienen en el propio instituto para castigar las conductas inmorales y que es regentada por el temible Comité Estudiantil Clandestino. Y, bueno, en la prisión hay látigos, fustas, torturas y demás.
Todo esto se encuentra en un marco de ecchi surrealista y paródico en el que no vas a encontrar nada que tenga un mínimo de sentido y verosimilitud. El personaje de la vicepresidenta es tremendo, es como si hubieran hecho la cosa más absurda del mundo en cuanto a personalidad y en cuanto a diseño como uno de los pilares en torno a los que gira la trama, mostrando toda la absurdez de lo que es el anime. Sí, el anime es ecchi, pero no es el ecchi básico que os vais a encontrar normalmente, es como ecchi parodia, llevándolo todo hasta los límites del absurdo.
La trama, como ya he dicho, también es absurda. En la prisión unos sufren muchos más que otros. Los métodos del Comité se basan en torturas y algunos de los prisioneros los agradecen. Otros quieren escapar. Pero tampoco quieren que les expulsen del instituto, cosa que no entiendo, porque si les expulsan salen directamente de la prisión. Pero bueno, todo lo que pasa son pretextos para que a los protagonistas se les ocurran los planes más enrevesados para lograr sus objetivos. Planes que darán lugar a situaciones obscenas de todo tipo.
Cuando digo de todo tipo es de todo tipo. No solo hablo de lo típico que puedes encontrar en un ecchi, hablo de chistes de caca, culo, pedo, pis. Y hay momentos que son tremendos, momentos que te marcan. La verdad es que a mí todo este anime me parecía un poco meh hasta que hubo un momento tremendo relacionado con caca. Es que no sabes ni lo que estás viendo, es tan surrealista que te tienes que reír. No voy a contar ninguna escena, porque el anime perdería mucho encanto si conocieras las cosas que pasas antes de verlas. Para que te hagan gracia tienen que pillarte de sorpresa. Y aquí no hemos venido a spoilear.
El final es una cosa extraña, entre abierto y cerrado. Se supone que el manga continúa, pero la verdad es que el anime acaba bastante decente. Supongo que lo habrán finiquitado en el fin de alguno de los arcos del manga. A pesar de eso, al final hay una especie de epílogo en el que se deja pie a futuras temporadas que, como podemos ver por el paso de los años, no se han llevado a cabo, aunque se supone que en la OVA adaptan más episodios del manga, pero, eso, que se supone que todo no está adaptado al anime. El caso es que me parece que ahí el final queda bastante bien.
El dibujo está bien, la animación también está ok para ser una chorrada de anime. Y el opening y el ending también me gustaron, se supone que los cantan los seiyuus de los cinco chicos protagonistas.
Y, bueno, en general, que os recomiendo que lo veáis, que de momento es de los que más me ha gustado de todo el reto. Llevamos una buena racha, ¿la romperemos en el año 2016? Próximamente lo sabremos.
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